Las técnicas de neuromodulación actúan modulando circuitos neuronales específicos mediante estimulación no invasiva, con el objetivo de aliviar síntomas en patologías como la depresión, el trastorno obsesivo compulsivo, los trastornos adictivos o los síndromes depresivos asociados a enfermedades neurodegenerativas.
La evidencia científica reciente muestra resultados consistentes y esperanzadores. En la depresión mayor resistente a tratamientos farmacológicos, por ejemplo, la estimulación magnética transcraneal (TMS) alcanza tasas de respuesta cercanas al 50% y de remisión en torno al 30% con un número necesario de pacientes a tratar (NNT) de 3 a 5, comparable a los fármacos más efectivos disponibles.
En el caso de la estimulación transcraneal por corriente directa (tDCS), los metaanálisis confirman una reducción significativa de la sintomatología depresiva y una buena tolerabilidad. Estos resultados explican que cada vez más hospitales en España estén incorporando la neuromodulación a su cartera de servicios como alternativa innovadora y segura para pacientes que no encuentran respuesta en los tratamientos convencionales.
En ese contexto, la Sociedad Española de Psiquiatría Clínica (SEPC) ha presentado hoy en Sevilla, en el marco de las III Jornadas de Actualizaciones en Neuromodulación, la primera Guía de Práctica Clínica sobre estimulación magnética transcraneal (TMS) y estimulación transcraneal por corriente directa (tDCS). Se trata de un documento pionero en España que consolida la integración de estas técnicas dentro del abordaje terapéutico de los trastornos psiquiátricos. La Guía aporta más de 100 recomendaciones para un uso seguro, eficaz y equitativo de estas técnicas.
La presentación oficial ha corrido a cargo del doctor Juan de Dios Molina Martín, vicepresidente de la SEPC y psiquiatra del Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid, quien ha ejercido la coordinación científica del grupo de trabajo responsable de la guía junto con el doctor Edorta Elizagárate, presidente de la SEPC, que ha liderado la coordinación institucional y el impulso estratégico del proyecto. Un panel multidisciplinar de expertos nacionales e internacionales ha revisado exhaustivamente durante un año la evidencia científica existente para ofrecer recomendaciones sólidas y aplicables en la práctica clínica real.
Juan de Dios Molina ha subrayado que el objetivo de la guía es ofrecer a los pacientes “alternativas eficaces y seguras”, especialmente a aquellos que no responden a los tratamientos convencionales, garantizando, además, criterios “homogéneos de calidad y equidad” en todo el territorio. “Hemos querido alinear el documento con los consensos internacionales más relevantes, pero aportando un marco propio adaptado a la realidad de nuestro sistema sanitario. Por eso, el documento ofrece un enfoque diferencial respecto a otras guías internacionales, al integrar no solo datos de eficacia y seguridad, sino también evidencia sobre coste-efectividad, resultados reportados por pacientes y criterios de calidad asistencial.”, ha destacado el vicepresidente de la SEPC, que ha añadido que ese carácter multidimensional confiere a la guía “una gran aplicabilidad clínica” y contribuye a homogeneizar la práctica “en un momento en que cada vez más hospitales públicos en España incorporan la neuromodulación a su cartera de servicios”.
El documento, además, identifica vacíos de conocimiento y propone líneas prioritarias de investigación, al tiempo que establece indicadores de calidad que permitirán evaluar la implantación de estas técnicas en el sistema sanitario español. Por eso, en palabras del experto, esta guía “no es un punto final, sino el inicio de un proceso de actualización periódica y de impulso a la formación continua en neuromodulación para los profesionales de la salud mental en España”.
En el mismo sentido se ha pronunciado el doctor Edorta Elizagárate, presidente de la SEPC y jefe de servicio del Hospital Psiquiátrico de la Red de Salud Mental de Álava, que ha apuntado que con la guía se pretende orientar el uso clínico de la TMS y la tDCS en base a la mejor evidencia disponible y a principios éticos, clínicos y sociales. “Nuestro objetivo es garantizar seguridad, eficacia, equidad de acceso y respeto a la autonomía del paciente en un momento en el que estas tecnologías están en plena expansión. Además, es importante subrayar que el proyecto ha contado con apoyo mayoritariamente institucional, lo que refuerza su independencia y el compromiso de la SEPC con el interés general”, ha afirmado Elizagárate, que ha alertado sobre los riesgos del uso no supervisado de dispositivos y ha hecho un llamamiento “a la regulación y a la sostenibilidad” de estas tecnologías: “Pedimos marcos regulatorios claros y destacamos la sostenibilidad medioambiental en todo el ciclo de vida de los equipos, así como la transparencia de profesionales y fabricantes”.
En la presentación del documento también ha intervenido el doctor Álvaro Moleón, psiquiatra del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla y director médico del Instituto Andaluz de Salud Cerebral, que ha sido uno de los miembros del panel revisor junto a otros once expertos nacionales e internacionales. Moleón ha coincidido con el resto de los expertos al apuntar que la guía elaborada por la SEPC sitúa a España “en la vanguardia europea” de la integración responsable y equitativa de la neuromodulación en psiquiatría, al aportar un instrumento “clave para mejorar la calidad asistencial y favorecer la homogeneidad en la práctica clínica”.